Mediocridad por doquier

Debate y salud, columna de Jacinto Herrera León: Mediocridad por doquier.

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

A pesar de la incesante lucha por alcanzar altos estándares y enarbolar la excelencia, la mediocridad sigue siendo un estilo de vida que impacta negativamente en el colectivo con valores. Esta mediocridad cual cáncer incipiente, invade los espacios en cualquier terreno de la vida, victimando desde el menos estudiado, hasta quien ostenta numerosos títulos académicos y/o nobiliarios.

Pero el problema radica en que a pesar de que conocemos a estos sujetos de poca monta, en sumadas ocasiones son protegidos por quienes desean mantener ese ambiente que favorece interese personales, utilizando argumentos legaloides para mantener y sostener a estos pusilánimes. ¿Pero qué es un mediocre quien cual cáncer se encuentra incrustado en los rincones mas oscuros entre escritorios y papeles?

La palabra mediocre proviene del latínmediocris que significa “medio” o “común”. Etimológicamente está compuesto por el vocablo medius que expresa “medio o intermedio” y ocris que significa “montaña o peñasco escarpado”, por lo que indica a algo o alguien que se queda a mitad del camino siendo la cima de la montaña el destino final. La palabra mediocre es utilizada como sinónimo de: mezquino, mediano, vulgar y común. Algunos antónimos de mediocre son: excelente, magnífico, brillante y superior.

Mas de uno de ustedes han sido víctima del fuego amigo, que te atrapa en su limitado espacio de confort, característicamente ocupado por semejantes. Ante tal escenario nos preguntamos -¿Cuáles serían los enemigos o factores internos y/o externos que orillan a estar dentro del selecto grupo de mediocres?-; abundando me permitiré citar, a la carencia heredada de buscar un propósito más elevado, continuando con la búsqueda del aburrimiento, evitando utilizar nuestro tiempo para la reflexión, para hacernos preguntas trascendentes o para sumergirnos en terrenos desconocidos.

En el mismo orden de ideas también tenemos al autoengaño, creando y creyendo en una falsa realidad que imagina objetivos que distan mucho de poder enfrentar, por lo que necesariamente se rodea de personas que le dicen lo que quiere escuchar; igualmente destaco a los miedos, creados por el mediocre, mismo que utiliza para justificar su falta de pericia y conocimiento, y así podríamos continuar con una larga lista…

Desafortunadamente la gente con este calificativo, son parte del retroceso, del estancamiento que impide el crecimiento del colectivo, que en su conjunto lucha por una nueva administración con valores, que permitan romper la inercia lacerante.

Cuando las personas tenemos muchos ayeres, vemos con tristeza como la envidia, la desidia, apatía y “pequeñez”, busca con intrigas y “chismes de pasillo”, ocupar su tiempo, que sin duda es lo único que jamás podremos recuperar si lo perdemos.  Así finalmente te digo, que jamás te des por vencido, “sal de la caja”, y continúa luchando por cambiar y construir un futuro que de lustre al ser humano.

Lo más leído

skeleton





skeleton