En México, el 15 de mayo se conmemora el Día de la Maestra y del Maestro para reconocer a quienes se dedican a la noble tarea de enseñar y formar a las generaciones que, en algún momento, habrán de tomar las riendas de la sociedad. Es una de las profesiones más importantes y, sin pretendida arrogancia, podría afirmar que es la de mayor relevancia para cualquier sociedad que aspire a mejorar sus condiciones, pues su labor se enfoca en la formación de personas desde sus diferentes dimensiones: cognitivas, físicas, emocionales y sociales.

Por tal motivo, adquiere especial relevancia lo que hace poco más de cien años escribió uno de los pedagogos más destacados de Yucatán: don Rodolfo Menéndez de la Peña, nacido un 15 de mayo de 1850 en San Juan de los Remedios, Cuba, a través de una poderosa composición poética titulada “El Maestro”, publicado en La Escuela Primaria, en su edición del 15 de mayo de 1900.

Se trata de un poema en el que Menéndez de la Peña rinde homenaje al maestro al exaltar su papel como figura cimera y central para el progreso social y cultural del país.

En primera instancia, lo presenta como un guerrero armado con el conocimiento, que lucha contra la ignominia de la ignorancia al decir: “El maestro es un soldado / de la ciencia y de la patria: / su vida, una heroica lucha / contra la torpe ignorancia”.

Mediante una metáfora, señala que los salones de clase representan el campo de batalla en la que combate “por la perfección humana".

En la tercera estrofa, describe al maestro como portador de la oriflama (bandera), enarbolando valores como la cultura, la sabiduría, la belleza y la paz.

Con ello, eleva su figura a altos ideales de nobleza en su labor cotidiana dentro del aula de clases. Versos más adelante, ofrece una imagen del maestro como paladín de la libertad, la democracia y la justicia, al referir, por ejemplo, en la quinta estrofa: “De la augusta Independencia / arde en su pecho la llama; la Libertad, la Reforma / son sus diosas veneradas”. Las estrofas sexta y séptima completan esa imagen combativa.

Al final del poema, presenta al maestro como pieza clave para el engrandecimiento de una nación: “Es la más firme columna / de una nación ilustrada”.

Concluye afirmando que la gloria del maestro reside en formar a infancias y juventudes en las ciencias, la justicia y la libertad.

“El Maestro” es un canto épico y romántico en el que Menéndez de la Peña rinde homenaje a quienes, desde el aula, actúan como héroes silenciosos y enfocados en realizar verdaderas transformaciones en la sociedad.

Sirva este texto para rendir homenaje a un gran pedagogo, así como a todas y todos los maestros: a quienes, con su sabiduría, contribuyeron a mi formación, a mis compañeras y compañeros de la Unidad Académica de la UADY y del Club Preparatoriano; y, de manera muy especial, a mi esposa, quien con su dedicación orienta y forma a jóvenes preuniversitarios.

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