IA y energía, en sinergia para el progreso y la prosperidad sostenible

Construyendo, columna de Raúl Asís Monforte González: IA y energía, en sinergia para el progreso y la prosperidad sostenible.

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En la última década, la Inteligencia Artificial (IA) y el sector energético han emprendido una alianza que promete revolucionar no solo la forma en que producimos y consumimos electricidad, sino también el rumbo de la innovación y la sostenibilidad global. A medida que la demanda eléctrica de los centros de datos, el corazón palpitante de la IA, se proyecta a más del doble hacia 2030, alcanzando cerca de 945 terawatts/hora, equivalente al consumo eléctrico anual de Japón, resulta evidente que estamos ante una transformación profunda en el equilibrio energético mundial.

Por un lado, la IA actúa como catalizadora de esta explosión de demanda. Los algoritmos de aprendizaje profundo, los modelos de lenguaje masivos y las aplicaciones de visión por computadora exigen centros de datos cada vez más potentes y refrigerados, impulsando un consumo eléctrico sin precedentes.

Aunque globalmente estos centros de datos representen menos del 10 por ciento del crecimiento proyectado de la demanda eléctrica hacia 2030, su impacto local en ciertos países puede ser abrumador. En Japón constituyen más de la mitad del aumento, y en Estados Unidos rozan esa misma porción. En Malasia, alcanzan el 20 por ciento del crecimiento de la demanda.

La IA también se perfila como una herramienta indispensable para optimizar la generación, la distribución y el consumo de energía. Gracias a técnicas avanzadas de análisis predictivo, las redes inteligentes (smart grids) pueden equilibrar en tiempo real la oferta de fuentes renovables, como la eólica y la solar fotovoltaica, con la demanda de los consumidores y de los propios centros de datos. Al anticipar picos de consumo, los sistemas basados en IA pueden desviar excedentes renovables hacia el almacenamiento en baterías o incluso gestionar la carga de vehículos eléctricos para evitar sobrecargas en la red.

Este doble filo plantea desafíos y oportunidades para México. Por un lado, la tensión sobre la seguridad energética podría intensificarse, ya que el país necesita diversificar su matriz hacia renovables y gas natural para sostener el crecimiento de la IA sin comprometer el suministro a la industria y los hogares. Por otro, la IA puede convertirse en aliada de la transición energética, desde optimizar las rutas de transporte de combustibles hasta predecir el rendimiento de paneles solares en zonas remotas.

La ciberseguridad energética ha pasado de ser un riesgo teórico a una amenaza tangible. Los ciberataques a empresas de servicios públicos se han triplicado en cuatro años y su sofisticación crece al amparo de herramientas de IA. Paradójicamente, es esa misma IA la que hoy ayuda a detectar intrusiones, analizar patrones anómalos y responder en milisegundos para proteger infraestructuras críticas.

En el terreno de las emisiones, el saldo podría ser neutro o incluso positivo. Aunque los centros de datos añadan emisiones por su voracidad eléctrica, este incremento es pequeño frente al total del sector. Si la adopción de IA para optimizar procesos industriales y energéticos se masifica, las reducciones podrían compensar con creces el alza generada.

La IA está emergiendo como coautora de la innovación científica, acelera el descubrimiento de nuevos materiales para baterías de alta densidad, mejora la eficiencia de las células fotovoltaicas y modela sistemas de captura de carbono.

En México, fomentar la colaboración entre universidades, centros de investigación y el sector privado será clave para aprovechar esta sinergia.

La relación entre IA y energía no es una simple coincidencia tecnológica, sino el cimiento de un nuevo paradigma industrial. Si México apuesta por políticas claras de diversificación energética, invierte en infraestructura digital segura y promueve la investigación conjunta, podrá surfear la ola de la transformación, convirtiendo desafíos en palancas de crecimiento y sostenibilidad.

@raulmonforteg

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