El visitante marrón
Al sargazo se le llama “visitante incómodo”, sobre todo por estas fechas de vacaciones veraniegas, cuando Quintana Roo ya activó...
Al sargazo se le llama “visitante incómodo”, sobre todo por estas fechas de vacaciones veraniegas, cuando Quintana Roo ya activó el operativo de la temporada, durante la cual espera recibir más de 2 millones de turistas, porque el alga representa un desafío turístico, ambiental, económico y sanitario. Aun cuando el arribo no se registra todos los días ni en todas las playas, este año habría una cifra récord. Lo peor sucedería en agosto.
Hace unos días la Gaceta Politécnica pronosticó un volumen aproximado de 37 millones de toneladas este 2025, lo cual superaría el máximo histórico de 2018 cuando se registraron 22 millones de toneladas. Son datos de la doctora Norma Muñoz Sevilla, investigadora del Centro Interdisciplinario de Investigaciones y Estudios sobre Medio Ambiente y Desarrollo (Ciemad) del Instituto Politécnico Nacional.
Según la especialista en mares y costas, el sargazo modificó su desplazamiento en los últimos años: antes provenía desde la costa oeste de África hasta el Mar de los Sargazos, atravesando el Atlántico; ahora se extiende desde África Occidental hasta el Golfo de México, formando un corredor marino conocido como “cinturón de sargazo”. La nueva ruta se ve influenciada por la acumulación de nutrientes provenientes de los ríos Amazonas y Orinoco, más al sur del continente. El mapa publicado ofrece detalles que lo explican todo.
Esa cifra es distinta a la recolección. La Marina informa que la extracción este año suma 44 mil toneladas. La temporada se extiende de marzo a agosto. Es una misión gigantesca, que se constata diariamente en el litoral. Para la Estrategia de Atención al Sargazo 2025 la Semar desplegó personal, buques y maquinaria en tres zonas: Cancún, Isla Mujeres y Puerto Morelos en el norte; Playa del Carmen, Cozumel y Tulum en el centro, y desde Mahahual hasta Xcalak en el sur.
Otros esfuerzos extraordinarios son los del gobierno de Quintana Roo y de los municipios directamente impactados, que en equipo con la iniciativa privada y la sociedad tratan de contener y recoger la mayor cantidad de toneladas posibles que arroja este fenómeno imparable, con el cual se ha aprendido a convivir a duras penas. Caso emblemático es el de Puerto Morelos, donde la barrera antisargazo ha sido un éxito. Para pensar en replicar en otros lugares.
Los números del verano son auspiciosos. El destino brilla pese al “visitante incómodo” de tono marrón.
@msalinas21