Gobernar en tiempos de grilla
En tiempos de grilla, de viajes y exhibiciones de todo tipo rumbo al 2027, en Quintana Roo ocurre algo distinto, y es de un trabajo cercano...
En tiempos de grilla, de viajes y exhibiciones de todo tipo rumbo al 2027, en Quintana Roo ocurre algo distinto, y es de un trabajo cercano a la gente, de dar respuesta a las y los que confiaron en las autoridades que ahora gobiernan.
Vamos a empezar por el municipio de Benito Juárez, Cancún, el bello paraíso con Ana Paty Peralta al frente, quien está concentrada, con los pies en la tierra y con el firme propósito de servir todos los días al pueblo que la eligió, sin dobles agendas ni en municipios que no le corresponde.
Ana Paty no hace grilla, no está distraída en futurismos, no reparte tiempo entre su encargo y sus ambiciones. Su energía y su agenda están completamente puestas en la transformación de Cancún. En escuchar, resolver y caminar junto a la gente, congruente con los principios de la 4T y con la gobernadora Mara Lezama.
Esa forma de gobernar, cercana, directa, sin simulaciones, es congruente con los principios de la Cuarta Transformación, pone el poder al servicio de la justicia social, atiende primero a quienes más lo necesitan y acaba con el viejo modelo de políticos lejanos que prometen mucho y cumplen poco. Eso no gusta de ninguna manera a los que quieren volver y a los que quieren mantenerse en el poder.
Hay que decir que en Cancún se vive una nueva forma de gobernar, una que se mide en resultados y en hechos, no en discursos. Las cifras no mienten: a mitad del año 2025, Ana Paty Peralta ya tiene en proceso casi de 700 millones de pesos en obras públicas, cifra jamás registrada en el municipio.
Pero además, estas obras se realizan donde antes nunca llegaban, es decir, en las zonas irregulares, dicho sea de paso, donde muchos de los políticos solo se asoman en campaña, hoy hay calles nuevas, pavimentación, alumbrado, drenaje, y sobre todo, esperanza. Son el inicio de una transformación profunda: regularización, servicios básicos, certeza jurídica y dignidad.
Es precisamente esa forma de gobernar, con visión y sin improvisación, que ha puesto a Ana Paty en el ojo de las campañas negras, pero como dice el dicho, trabajo mata grilla y la presidenta municipal lo aplica a cabalidad. La historia lo va a recordar: en tiempos de grilla, ella eligió gobernar.
Así las cosas en Quintana Roo, donde las presidentas municipales que hacen bien las cosas, que responden al pueblo tienen que sortear, con acciones positivas, la mala propaganda. Hasta la próxima.