Tulum: el sueño que se fue…
Tulum fue un destino de moda debido a su popularidad entre celebridades e influencers, su ambiente bohemio y chic...
Tulum fue un destino de moda debido a su popularidad entre celebridades e influencers, su ambiente bohemio y chic, y su atractivo para el turismo de alto poder adquisitivo. Estas son las razones por las que Tulum fue un destino de moda:
Marketing y exclusividad: se posicionó como un destino exclusivo, atrayendo a personalidades famosas e influencers, lo que elevó su perfil global.
Ambiente "eco-chic": su combinación de naturaleza, ruinas mayas, playas paradisíacas y un ambiente relajado y bohemio, incluidos los mejores DJ’s y Raves del caribe internacional, lo hizo muy atractivo.
Estilo de vida y gastronomía: inspiró un estilo de vida asociado a la salud, el bienestar, restaurantes de moda y bares exclusivos, incluso influyendo en la decoración y la moda.
Potencial de inversión: se consideró un mercado inmobiliario con potencial de crecimiento, lo que atrajo a inversores.
Sin embargo, todo eso se encuentra en el pasado, hoy Tulum tiene una crisis turística debido a una combinación de factores que han ahuyentado a los visitantes, lo que ha provocado una baja ocupación hotelera y ha afectado negativamente la economía local.
¿Cuáles han sido los aspectos que han detonado esta grave crisis? Esta es una pregunta compleja en su respuesta, he aquí algunos factores que provocaron la actual situación:
Precios excesivos: los costos de los servicios, alojamiento y alimentos se han vuelto exorbitantes en relación con la calidad ofrecida. Los precios excesivamente altos han alejado tanto al turismo nacional como al internacional, que busca opciones más asequibles en otras partes del Caribe.
Abusos y malos tratos: se han reportado casos de abusos a turistas y tratos injustos por parte de comerciantes y prestadores de servicios, entre ellos los taxistas y los transportes del flamante aeropuerto de Tulum. Esto ha generado un sentimiento de decepción y estafa entre los visitantes, afectando la reputación del destino.
Acceso restringido a las playas: el establecimiento de una reserva costera federal ha introducido tarifas de acceso a las playas, lo que ha generado frustración en el público. Además, la privatización de algunas zonas ha limitado el acceso a las playas públicas, lo que ha deteriorado la experiencia para muchos turistas. Incluido el “Parque del Jaguar” operado por el ejército mexicano.
Problemas ambientales: la llegada masiva de sargazo ha afectado la belleza natural de las playas y ha desalentado a muchos viajeros. Además, la mala planificación urbana y el desarrollo desmedido han provocado un deterioro ambiental, incluyendo la contaminación de los cenotes.
El sargazo ha afectado a Tulum de manera grave, principalmente en la economía turística, debido a su impacto visual, los malos olores y la dificultad para acceder a las playas. Además de dañar el ecosistema marino al bloquear la luz solar y los niveles de oxígeno, la llegada masiva de sargazo ha resultado en una baja afluencia de turistas y ha afectado la economía local.
Las playas se ven cubiertas de un alga que cambia el color del mar de turquesa a café, lo que desanima a los visitantes. La baja afluencia de turistas ha afectado a negocios y prestadores de servicios en lugares como Playa Punta Piedra.
Inseguridad: el aumento de la violencia en el estado, que incluye tiroteos entre bandas rivales, ha afectado la percepción de seguridad en la zona. A pesar de que Tulum ha tenido índices de criminalidad más bajos que otras ciudades, los incidentes reportados han generado preocupación.
Infraestructura insuficiente: la rápida expansión ha superado la capacidad de la infraestructura local, lo que ha provocado problemas en el suministro de servicios básicos, como el racionamiento de agua en algunas zonas.
Dependencia exclusiva del turismo: la economía de Tulum depende casi por completo del turismo, lo que la hace vulnerable a fluctuaciones y crisis como la actual. Cuando los visitantes se marchan, el impacto económico se siente de manera inmediata y profunda, llevando al cierre de negocios y la huida de trabajadores, como actualmente sucede, con las principales locaciones de flujo turístico de la ciudad luciendo como pueblos fantasmas. Actualmente Tulum tiene una ocupación promedio del 46%.
Impacto de proyectos federales: la creación del Parque del Jaguar, un proyecto federal, ha generado polémica por bloquear el acceso a Playa Paraíso, uno de los puntos más populares, lo que contribuyó a la disminución de visitantes en esa área.
Conclusión: en tiempos de crisis, como el que actualmente se vive, siempre se buscan culpables y en este caso los hay:
A) Abusos sostenidos, por años, al turismo por parte de comerciantes, hoteleros y desarrolladores inmobiliarios; B) Malas prácticas de gobernanza y seguridad por parte de la autoridad municipal, Diego Castañón Trejo verdaderamente se ha lucido como el peor presidente Municipal que ha tenido Tulum; C) Falta de acciones reales de control y mitigación por parte del Gobierno del Estado en materia de comercio responsable, seguridad, manejo del sargazo y control de operaciones federales como los abusos cometidos en contra del turismo en el Aeropuerto Internacional de Tulum, así como las afectaciones al libre tránsito de pobladores y visitantes hacia el mar, por parte del ejército en el Parque el Jaguar; D) La carente coordinación y toma de responsabilidad por parte de autoridades federales con los gobiernos estatal y municipal para evitar las afectaciones antes mencionadas.
Y así es como a Quintana Roo se le fue el sueño de Tulum…
