Durante la Misa dominical celebrada en la Plaza de San Pedro ante una multitud de fieles, el papa León XIV lanzó un llamado a la reconciliación global y criticó el auge de los movimientos políticos nacionalistas. Sin mencionar países ni líderes específicos, advirtió sobre los riesgos de una mentalidad excluyente que separa a las personas y alimenta la indiferencia.

“Donde hay amor, no hay lugar para los prejuicios ni para las zonas de ‘seguridad’ que nos separan de nuestros vecinos”,

expresó.

Según el pontífice, este tipo de divisiones refuerzan barreras que deben ser derribadas por el Espíritu Santo, a quien pidió ayuda para superar el odio y construir puentes de entendimiento.

El papa recordó las palabras de su antecesor, Francisco, quien en Pentecostés de 2023 lamentó la paradoja de un mundo hiperconectado pero marcado por la desconexión humana y la soledad. Siguiendo ese espíritu, León XIV subrayó que solo desde la paz interior es posible irradiar paz a las familias, a la sociedad y al ámbito internacional.

Además, condenó con firmeza las guerras que afectan al planeta y reiteró su oración por la paz en las zonas en conflicto. Pidió específicamente por el fin de la violencia en Ucrania y un alto al fuego en Gaza.

Desde el inicio de su pontificado, León XIV ha promovido la paz como eje central de su labor pastoral. Su primer mensaje al mundo, “La paz sea con todos ustedes”, marcó la ruta que ahora consolida con llamados constantes al diálogo y a la unidad entre los pueblos.