La mañana del 1.º de agosto, un tiroteo sacudió a la localidad de Anaconda, en el estado de Montana, Estados Unidos.

El incidente ocurrió en The Owl Bar, un conocido establecimiento local, donde un sujeto armado abrió fuego contra varias personas, dejando un saldo preliminar de cuatro muertos y múltiples heridos.

El ataque fue reportado alrededor de las 10:30 a.m., lo que provocó una movilización masiva de fuerzas de seguridad.

La escena fue rápidamente acordonada por la policía local, en coordinación con agencias estatales.

Sospechoso identificado y operativo de búsqueda

 

La policía estatal identificó al presunto tirador como Michael Paul Brown, de 45 años, residente de la zona.

De acuerdo con testigos, escapó del lugar en una camioneta Ford F-150 blanca, con dirección desconocida.

Las autoridades desplegaron un fuerte operativo en vecindarios cercanos y zonas rurales.

La población fue puesta bajo alerta, y se emitió una orden de resguardo en casa (shelter-in-place) para evitar nuevos riesgos.

Equipos SWAT, drones y helicópteros se sumaron a la búsqueda, mientras se investiga el posible móvil del ataque.

Una comunidad en shock

Anaconda, una ciudad de menos de 10 mil habitantes, no está acostumbrada a este tipo de violencia.

Comerciantes y residentes se refugiaron en sus casas ante el despliegue de seguridad.

Incluso guarderías y centros escolares tomaron medidas preventivas para proteger a los niños.

Varios ciudadanos expresaron su desconcierto:

“Aquí todos se conocen, nadie espera que algo así ocurra en un lugar como este”, declaró un vecino que pidió permanecer en el anonimato.

Antecedentes de violencia en Montana

Aunque Montana permite la portación abierta de armas, los tiroteos masivos no son frecuentes.

Sin embargo, en los últimos cinco años ha habido un incremento de hechos violentos aislados, lo que ha reabierto el debate sobre control de armas incluso en estados tradicionalmente pro-armamento.

Con información de Milenio