Tras la intoxicación alimentaria que dejó a 30 personas afectadas en el municipio de Seyé el pasado domingo 1 de junio, la presidenta municipal, Wendy Marielly Cauich Mariela, aseguró que el ayuntamiento no tiene responsabilidad directa en el incidente, pues el producto presuntamente contaminado no fue procesado en
instalaciones municipales.

“Las investigaciones nos dicen que la cabeza de res fue comprada en Kanasín. Siguen las investigaciones por parte del gobierno. Cofepris (Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios) ya nos dio un dictamen donde no es nuestra responsabilidad, sino que está en investigación continua. No darán otro informe, lo haremos saber cuando eso ocurra”, declaró la munícipe, quien añadió que hasta el momento no se han aplicado sanciones, aunque sí se han realizado visitas domiciliarias relacionadas con el caso.

De acuerdo con información del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Yucatán, 16 de las personas intoxicadas fueron atendidas en el Hospital Rural Número 59 del programa IMSS-Bienestar en Acanceh, donde
recibieron hidratación y tratamiento para contrarrestar el malestar, y posteriormente fueron dadas de alta. El resto de los pacientes fue trasladado al Hospital General “Dr. Agustín O’Horán”, en Mérida, por medio del apoyo del Ayuntamiento de Seyé.

La Secretaría de Salud de Yucatán (SSY) informó que su Dirección de Riesgos Sanitarios realizó la verificación de los puestos de venta de comida en los alrededores del Palacio Municipal, donde se adquirió la carne. El diagnóstico preliminar de los pacientes fue “Gastroenteritis PB alimentaria”, es decir, un diagnóstico presuntivo de intoxicación alimentaria, en espera de confirmación mediante estudios de laboratorio.

El caso recordó a la comunidad el episodio registrado en junio de 2022, cuando más de 500 personas resultaron intoxicadas en el mercado municipal de Seyé tras consumir cochinita pibil contaminada con clembuterol, suceso que tuvo repercusión nacional e internacional.