Orden judicial frena regularización de Adamar Solimán en Tulum
El juzgado federal falló a favor de la asociación civil DMAS, para anular la licencia municipal DGDTUSN 24-0459, expedida por el municipio de Tulum.
La asociación civil Defendiendo el Derecho a un Medio Ambiente Sano (DMAS) logró una suspensión para que se paralice cualquier tipo de licencia municipal que el gobierno de Tulum ha expedido a favor del edificio Adamar Solimán, construcción realizada sobre un área de anidación de tortuga marina.
Esta construcción cuenta con una sentencia de amparo que obliga al desarrollador demoler el inmueble, aunque hasta ahora no se ha hecho efectiva la orden debido a que la empresa involucrada impugnó la medida.
No obstante, en un acto de regularización solicitado por la empresa al municipio de Tulum, la asociación civil DMAS promovió un nuevo amparo con el que busca anular la autorización a favor de la empresa Desarrollos Tulum Dieciséis.
El Juzgado Segundo de Distrito le dio la razón a DMAS, debido al interés de protección del derecho a un medio ambiente sano.
“Se solicitó la medida cautelar bajo el parámetro de una afectación al derecho a un medio ambiente sano, en el que por regla general, al admitirse la demanda de derechos fundamentales, las alegaciones se sitúan sin prueba plena que demuestre el daño inminente al medio ambiente; la naturaleza colectiva del derecho a un medio ambiente sano, genera que el daño inminente sobre los servicios ambientales que presta un ecosistema, deba ser evaluado bajo una perspectiva del principio de precaución, conforme al cual la falta de certeza científica no puede llevar a considerar que no existe aquél”, argumentó Fátima Marroquín Rodríguez, juez segunda de Distrito.
La demanda de amparo fue promovida en febrero de 2024 contra diversas autoridades por la permisión de ejecución de trabajos de construcción a favor del desarrollador Adamar Solimán.
Apenas el pasado martes 9, el juzgado federal falló a favor de la asociación civil, para anular la licencia municipal DGDTUSN 24-0459, expedida por el municipio de Tulum.
Con lo anterior, la situación legal de Adamar Solimán se complica aún más, aunque a pesar de ello, la edificación continúa.